En el ocaso de los Juegos Olímpicos de Londres 2012, habiendo superado desafíos monumentales a los tirones, con palos en las manos, a las volcadas o tirando desde lejos, con barlo y sotavento, remando como esclavos, a puro ace, colgados de la argolla o a las patadas. En el balance de las alegrías y tristezas hubo un común denominador, el amateurismo.
El amateurismo, ese oscuro rincón altruista donde todo se hace cuesta arriba, donde no hay más recurso que la propia convicción y de donde emergen las verdaderas leyendas. El amateurismo es el descarte a flor de piel, la siempre mala inversión, la escoria indigna del capitalismo en connivencia con el grueso colectivo social. El amateurismo es esa política de vida que en estos tiempos nos ha dado otra lección fundamental y que como condición inalienable de la humanidad debemos entender así: "Quién renuncia a la política renuncia a la lucha y quien renuncia a la lucha renuncia a la vida. Porque la vida es lucha."
El futbol, el deporte nacional de los mil millones anuales, del cual nos jactamos de ser los mejores del mundo ni siquiera consiguió una plaza. Y esto es muy saludable para el amateurismo deportivo, pero también partidario, porque refuta con una contundencia implacable ese nefasto axioma que sostiene que "para hacer política se necesita plata".
No, esto no es un axioma ni mucho menos compañeros y compañeras, esto es una falacia de las más grotescas del universo, porque para hacer política solo se necesitan garra, altruismo y convicción.
GARRA - ALTRUISMO - CONVICCIÓN
¡...Vamos Argentina carajo...!
Mariano D. Sagasti, orgulloso amateur argentino.-
Este es un mensaje personal para el/la pelotudo/a que administra la programación la televisión pública que ayer, cuando Sebastian consiguió la persea dorada para toda la República Argentina se cago en todo un país para poner el partido poronga de San Martín de San Juan - Colón de Santa Fe: Andate a la reconcha de tu madre hijo de puta, despues ponés publicidad sobre la ley de medios audiovisuales gil.
No hay comentarios:
Publicar un comentario